Los fertilizantes ecológicos son utilizados para lograr buenos rendimientos productivos cuidando y respetando la salud del medio ambiente.
Los fertilizantes orgánicos se utilizan con el objetivo de mejorar la producción de los alimentos cultivados en el hogar o en un establecimiento.
En el caso de aquellos interesados en comenzar a producir propios alimentos, hacer crecer flores, tener plantas medicinales y demás en la huerta, hay diversos fertilizantes caseros que se pueden implementar de forma natural y que resultan muy económicos.
Las ventajas de los fertilizantes orgánicos
Los fertilizantes ecológicos tienen los siguientes beneficios:
• Permiten aprovechar residuos orgánicos.
• Incrementan la actividad microbiana del suelo.
• Recuperan la materia orgánica del suelo, promoviendo la retención de nutrientes y permitiendo la fijación de carbono en el suelo, así como la mejora de la capacidad de absorber agua.
• Suelen demandar menos energía para su elaboración.
De todos modos, también tienen poseen algunas desventajas, como:
• Pueden ser fuentes de patógenos si no están adecuadamente tratados.
Hoy en día, el uso de fertilizantes orgánicos está aumentando por la demanda de alimentos orgánicos y sanos para el consumo humano, y como una manera de generar conciencia sobre el cuidado del ecosistema y del medio ambiente.
¿Qué tipos de fertilizantes orgánicos existen?
Dentro de algunos ejemplos de fertilizantes orgánicos están:
- Estiércol: es uno de los fertilizantes más económicos. Se puede comprar u obtenerlo de animales. Este tipo de fertilizante asegura que las heces, que tienen una alta tasa de nitrógeno, puedan ser utilizadas directamente en la tierra.
- Humus de lombriz: es uno de los mejores abonos que se puede aplicar en las plantas. Además es muy económico ya que solo se necesitan conseguir las lombrices californianas.
- Té de banana: sirve para aportar el potasio que necesitan las plantas. Hay muchos cultivos a los que les sirve este aporte, como pueden ser las zanahorias, las habas y muchos más. Es muy común también en la época de floración aplicar este té, ya que es precisamente cuando más potasio precisa la planta para florecer.
- Fertilización con pasto cortado: este método sirve como una mecanismo rápido de descomposición y se implementa para enriquecer el suelo de nutrientes.
El proceso consiste en llenar un recipiente de 20 litros con recortes de pasto. Después, añadir agua y dejar reposar durante uno o dos días.Luego diluir mezclando una taza de hierba líquida con 10 tazas de agua y aplicarla sobre la base de las plantas.
- Fertilización con granos de café: es una excelente alternativa para usar los desechos del café. Actúa como fuente de nitrógeno para el suelo, además de ser rica en antioxidantes. Consiste en agregar los granos para su compostaje o espolvorear directamente sobre el suelo.
Fertilizantes caseros
Dentro de los fertilizantes que se pueden hacer en una casa o establecimiento existen:
- Cáscaras de huevos: poseen un doble beneficio. Se pueden utilizar como fertilizante o como repelente, en trozos o triturados. O en bloques, creando una especie de anillo en la base de la planta que actué como barrera para guardarlas de los caracoles y algunas orugas.
- Cenizas de madera: la ceniza de madera es rica en en potasio y en fósforo. Su preparación es muy fácil, consiste solamente en recoger la ceniza de la madera quemada y diluirla en agua.
En líneas generales, estos son algunos ejemplos de fertilizantes que permiten sustituir aquellos sintéticos o convencionales. De esta manera, se puede lograr un mejor rendimiento productivo y cuidar el medio ambiente y los recursos naturales.
