La producción argentina de arroz se encuentra en uno de sus mejores momentos y
presenta grandes resultados. La excelente performance actual del rinde y los aportes
que la ciencia supo brindar a los cultivos de este cereal en el país.
La producción de arroz argentina se encuentra en una de las mejores etapas que le
tocó atravesar a lo largo de la historia. Fue un largo camino de trabajo en conjunto
entre productores y técnicos hasta llegar al actual presente y se logró: hoy es el tercer
cereal en el ranking de siembra nacional.
Cabe recordar que el arroz es uno de los productos alimenticios más consumidos por
los seres humanos a nivel global. Por esta razón, científicos de todo el mundo han
dedicado innumerable cantidad de trabajos para su investigación de cara a un
desarrollo más eficiente.
Por cierto, el Instituto de Tecnología Agropecuaria, también conocido como INTA, no
fue la excepción. En concreto, el ente ha realizado un importante esfuerzo para
obtener mejores tecnologías para la producción de arroz argentina. Además, se
lograron nuevas variedades del cereal.
A propósito, el Programa de Mejoramiento de Arroz del INTA funciona desde la década
de 1980 y ha sido un gran ejemplo de visión a largo plazo. Todo el tiempo de foco en
científico hoy dan sus frutos…
Pero ¿Cómo se logró el excelente rendimiento actual? ¿Quiénes intervinieron en el
despegue de la producción argentina de arroz? ¿Cuáles fueron las decisiones
determinantes?
Los aportes de la ciencia a la producción argentina de arroz
Lo primero que hay que decir sobre el éxito de la producción argentina de arroz en el
presente es que nunca hubiese sucedido sin las innovaciones que la impulsaron. Para
ello se realizó un buen relevamiento del mercado.
En este sentido, desde el INTA, en su momento, se detectó que el enfoque estaba
puesto en el rendimiento agrícola. Sin embargo, los técnicos verificaron que el grano
no era de la mejor calidad posible y, por lo tanto, no podía competir en el mercado
internacional.
Así las cosas, los investigadores invirtieron la carga desde lo cuantitativo hacia lo
cualitativo y se dispusieron a trabajar en variedades. El objetivo era mejorar el valor y
sumar calidad para la gastronomía y para la comercialización industrial a gran escala.
Con los años, y gracias a la tecnología en genética, se llegó a presentar 10 nuevas
opciones de granos. Este es el catálogo completo:
- Memy Pora, Ñu Poty INTA CL, Puita INTA CL, Guri INTA CL y Camba INTA
PROARROZ: Cinco variedades de tipo grano largo fino - Inta Mati: Opción aromática con rasgos característicos de la India
- Alfredo y Vicente INTA: Una de las últimas variedades desarrolladas y
presentadas en el año 2024 - ArborINTA: Como su nombre lo indica es un tipo arborio ideal para la
gastronomía que requiere estilos cremosos y masticables - Kosh INTA: Especialmente diseñada para la elaboración de sushi
- Angiru INTA: Grano largo que posee alta calidad y rendimiento.
De esta manera hoy la producción argentina de arroz se posiciona en escenarios como
Europa, Asia y, desde luego, toda Latinoamérica.
El aumento de la producción argentina de arroz
En las últimas décadas, la producción argentina de arroz ha tenido su gran despegue.
Según cifras oficiales estos son los indicadores más relevantes:
- En Argentina se cosechan casi dos millones de toneladas de arroz por año.
- El progreso de la producción argentina de arroz de la última década fue del
121% con un avance en el rinde del 16% - Las provincias que más aportan al sector son Entre Ríos, Corrientes, Formosa,
Chacho y Santa Fe. - Los países que más reciben las exportaciones de la producción argentina de
arroz son India, Pakistán, Italia, España y Uruguay - En relación al aporte del programa del INTA la equivalencia económica en
ganancias calculada desde el 2007 hasta la actualidad es de casi 2100 millones
de dólares.
A la hora de remarcar alguna de las dificultades a futuro que encuentra el sector en su
camino hacia la consolidación está la cuestión del agua. Es por eso que uno de los
próximos desafíos para el futuro inmediato es la resolución de la optimización de los
recursos hídricos.
La realidad es que la producción argentina de arroz se encuentra en su mejor
momento y, a su vez, no para de crecer. Por esta razón, más que nunca, el sector debe
ser apoyado y seguido de cerca por las autoridades. La apuesta siempre debería ir por
un trabajo integral entre todos los actores involucrados.